28 micrófonos no recomendables para podcasting, aunque estén de moda

Una mala recomendación repetida 1000 veces no deja de ser una mala recomendación

Los micrófonos no recomendables para podcasting, aunque estén recomendados en mil sitios distintos, no dejan de ser eso… micrófonos que podrían ser interesantes para algunas aplicaciones, pero desde luego no para podcasting. Como ya sabes, en Internet no toda la información es precisa o está contrastada. Hay quien, con la mejor intención, hace recomendaciones poco acertadas, lo que puede hacer que invirtamos en un equipo poco adecuado para nuestro podcast. Y es lo que les ha sucedido a algunos podcasters.

Me gustaría que analizaremos juntos algunos de esos micrófonos para que, con la lógica y los datos en la mano. De esta forma podremos romper algunos mitos. La idea es descubrir hasta qué punto estos micrófonos son realmente recomendables para podcasting. Vamos a hacer un análisis exclusivamente desde el punto de vista del podcaster. Esto significa que pueden ser micrófonos geniales para otras muchas aplicaciones. Por tanto, no tienen por qué ser malos micrófonos, sino que para obtener resultados profesionales en podcasting tal vez sea una buena idea usar otros modelos.

Aquí están los 21 micrófonos no recomendables para podcasting, aunque eso sí, muy populares en Internet.

¿Qué es un micrófono recomendable para podcasting?

Vamos a partir de una base. Para ello, necesitamos saber lo que estamos buscando y a partir de ahí entenderemos por qué debemos descartar estos modelos. Un micrófono recomendable para podcasting debe cumplir con ciertos requisitos:

• Ofrecer una buena calidad de sonido
• Tener un comportamiento estable incluso cuando las condiciones acústicas no son las mejores
• No puede tener un precio desorbitado
• Su uso debe ser simple
• El mantenimiento debe ser nulo, más allá de un trato adecuado

Para que un micrófono cumpla con todas estas características, entonces un micrófono recomendable para podcasting debe tener estas características técnicas:

• Micrófono dinámico: El hecho de que sea dinámico simplificará mucho la configuración y el mantenimiento. Además son robustos y duraderos.
• Cardioide: Es importante que sea cardioide, supercardioide o hipercardioide para rechazar cualquier posible ruido, sobre todo si estamos en un ambiente no acondicionado acústicamente.
• Membrana grande: Si un micrófono tiene una membrana grande podría captar mejor los detalles de nuestra voz.
• Con un coste superior a los 100 euros: Por experiencia sabemos que un micrófono por menos de 100 euros no suele ser recomendable para aplicaciones profesionales.

Esa es la receta perfecta de un micrófono recomendable para podcasting. Así, con estos parámetros en mente, vamos a analizar algunos modelos.

Behringer Ultravoice xm8500

El micrófono Behringer Ultravoice xm8500 es un básico clásico… quizá demasiado. Podemos encontrar varias páginas web que recomiendan este modelo como un micrófono adecuado para podcasting. Pero vamos a detenernos un poco.

¿Es dinámico? Sí.

¿Es cardioide? Sí, pero cuesta 15,90 euros.

Y sí, es posible que el material para grabar audio se haya abaratado considerablemente, pero te puedo asegurar que por ese precio no vas a conseguir nada que haga justicia a tu voz. Esto de los micrófonos baratos no es nada nuevo. Ya en los años 90 podías comprar micrófonos Fonestar, la Behringer española de aquellos tiempos, por unos seis euros al cambio. El resultado sigue siendo el mismo. Es difícil encontrar un micrófono por este precio y que nos ayude a obtener una grabación fiable. Y ya que un micrófono dura toda la vida, tal vez podamos permitirnos invertir un poco más.

Tonor TC series y sus imitadores

Este, junto con todas sus variaciones e imitaciones, es uno de los micrófonos no recomendables por excelencia. Su diseño puede resultar atrayente y hasta apetecible. Pero sin duda, la calidad de sonido no es la mejor del mundo. Se trata de un micrófono de condensador que no llega a los 19 euros en la mayoría de tiendas. Este es sin duda el más eoconómico de los micrófonos no recomendables para podcasting. Pero veamos por qué.

La razón principal es porque resulta poco probable que por ese precio podamos obtener una cápsula con un mínimo de calidad que pueda recoger el sonido de tu voz con un mínimo de fidelidad. Lo he tenido en las manos y lo he probado. Si sonido es como si estuviera captando el sonido escondido debajo de una montaña de abrigos y luego el sonido fuera transmitido a través de una radio FM… Deja el dinero en tu bolsillo y espera a que venga algo mejor.

Neewer NW-800 o similares

En el mismo rango de precios podemos encontrarnos con uno de los micrófonos no recomendables para podcasting, pero que ha causado furor en Internet. Muchos se han visto seducidos por la idea de tener un micrófono con un aspecto que recuerda a los micrófonos profesionales de estudio, pero por menos de 22 euros. Y como ya sabes, en audio no importa tanto el aspecto, por lo que a cambio de 22 euros obtenemos lo que se espera de un micrófono de 22 euros. Al ser un micrófono muy popular, puedes encontrar algunas pruebas de audio en Internet. También hemos hecho un estudio de percepción con este micrófono para ver qué opina el público. Y el resultado es siempre el mismo: busca otra cosa. Es tentador, pero sigamos adelante a ver si encontramos algo mejor.

Behringer C-1 o similar

Aquí tenemos todo un éxito en ventas de Behringer, el modelo C1. También podemos encontrar sus equivalentes en otras marcas, como el Samson C01U Pro USB Studio. Todos ellos vienen de la misma fábrica. Se trata de un un micrófono que ofrece un mejor acabado y, por supuesto, una mejor calidad de sonido. Sin embargo no deja de ser un equipo con todo lo que la tecnología nos puede dar por 30 euros. Subiendo el listón 10 euros más en nuestra escala nos encontramos con un micrófono que ofrece una carcasa robusta, con acabado metálico y cierta coherencia en su diseño.

Aparte de cómo sea la calidad de sonido, lo cierto es que se trata de un micrófono de condensador, algo no demasiado adecuado para podcasting, a menos que tengamos una buena acústica en nuestro estudio. De hecho es el tipo de micrófonos que solía comprar para desmontarlo, quitarle lo que había dentro y aprovechar la carcasa para colocar otra circuitería y otra cápsula de más calidad en su interior. Por esas razones lo he incluido en la lista de micrófonos no recomendables para podcasting. Tal vez sea una buena idea buscar otro modelo que se ajuste más a nuestras necesidades.

Samson Go Mic

De toda la lista de micrófonos no recomendables para podcasting este es uno de los modelos más sorprendentes. Se trata de un micrófono con intención de mejorar el sonido del ordenador, tal vez para captar mejor el audio cuando estás en una videoconferencia o aplicaciones similares. Tiene un diseño que hace sencilla su colocación en la parte superior de la pantalla de la computadora.

No sé en qué estarían pensando los fabricantes pero colocar el micrófono en la parte superior de una pantalla implica que estará lejos de nuestra boca y muy cerca de los ventiladores del ordenador y otras fuentes de ruido, perfecto para tomas de de audio completamente alejadas de lo que buscamos en podcasting.

Con ese posicionamiento conseguiremos un audio lejano, confuso y lleno de ruidos. Todo ello por 49 euros… ¿En serio? Este es seguro uno de esos micrófonos no recomendables para podcasting. Tal vez sirva para otra cosa.

Samson Meteor

Puedo comprender perfectamente por qué se recomienda este micrófono. Y es que su diseño y su tamaño puede llamar la atención de muchos. Pero no deja de ser una cápsula de condensador barata en un molde con un buen diseño.

Lo que sucede es que ese mismo diseño invita a colocar el micrófono en la mesa, lo que lo hace poco práctico para poder hablar cerca de él. Tiene rosca de montaje para pies de micró y trípodes, pero aún así, donde mejor luce es en la mesa.

Sin duda sería un micrófono ideal si pudiéramos cambiar todo su hardware interior. Mientras tanto no deja de ser un micrófono ideal para adornar la mesa. A pesar de que no sea un buen candidato para podcasting, he decir que su diseño vale cada uno de los 69 euros que cuesta en el mercado. Puede llegar a ser un micrófono «usable» si lo colocas a 5 centímetros de la boca con un antipop, un antivientos y dentro de un estudio profesional. Claro, que para eso hay otras opciones más prácticas y es por eso que resulta uno de los micrófonos no recomendables para podcasting.

Audio-Technica ATR2100x-USB o similar

Este es uno de los micrófonos más icónicos de cuantos hay en la lista. Se trata de un micrófono que ha gozado de gran popularidad entre los primeros podcasters, hace ya algunos años. Sin embargo, bien podríamos llamarlo «el micrófono que lo hacía todo y nada».

Me explico: Hay que reconocer que tanto el ATR2100 como su equivalente en otras marcas, como el Samson Q2U, resolvían varios problemas al mismo tiempo. Se trata de un micrófono de conexión dual, es decir, que te permite conectarlo por XLR, si tienes una tarjeta de sonido, o directamente a través de USB si no tienes ninguna. Pero no solo eso, sino que su diseño estaba muy bien pensado, porque también incluye una salida de monitor para auriculares, de forma que puedes escucharte sin latencia y comprobar que estás haciendo bien la grabación.

En aquellos tiempos era toda una revolución porque es como tener todo un equipo de podcasting en una sola pieza del mismo tamaño estándar que cualquier otro micrófono y por un precio inferior a los 70 euros.

Se trata de un modelo con muy buenas intenciones, pero la construcción de su cápsula no ofrece toda la nitidez de voz que hoy se espera de un podcast. Por ello, tristemente, lo debemos descartar y pensar que es uno de los micrófonos no recomendables para podcasting

Blue Microphones Blue Snowball

Blue Microphones siempre ha tenido un espíritu de innovación desde sus inicios en los noventa, pero fue en 2008 cuando recibió el empujón definitivo, tras la venta de la empresa a un fondo de inversión que le dio su merecida visibilidad. Desde entonces ha hecho micrófonos verdaderamente llamativos, como el Blue Snowball, un concepto diferente de micrófono que consiste en una bola. Tanto el Snowball como su versión más económica, el Snowball iCE, son micrófonos interesantes por su diseño, pero no dejan de ser un micrófono de condensador que no es fácil colocar delante de la boca, con lo que no podremos obtener las mejores grabaciones. Es bonito, pero poco práctico.

Hay que reconocer que por su precio, menos de 70 euros, suena bastante bien, aunque no lograremos la mejor acústica. Por su diseño es totalmente comprensible que a veces recomienden este micrófono, a pesar de ser claramente uno de los micrófonos no recomendables para podcasting. Incluso su directora de relaciones públicas Hillary Lyle lo recomienda para crear podcasts y contenidos similares. Pero si vas en serio con tu proyecto de podcasting necesitarás una herramienta con algo más de fidelidad.

Blue Snowflake

De nuevo… ¿en serio? Buscando un equivalente en la línea del Samson Go Mic, Blue lanzó al mercado el Snowflake, un micrófono de condensador USB, sin más conexiones ni controles. Si bien es cierto que suena bastante cristalino para este baremo de precios, sigue estando pensado para colocar encima de la mesa o en la pantalla, lo que hará que el micrófono siempre esté lejos de nuestra boca, provocando la consecuente reverb. Hay que decir que tiene un precio bastante elevado para las prestaciones que ofrece y por supuesto, queda lejos de ser parte de un equipo de podcasting para productores serios. Sin duda es uno de los micrófonos no recomendables para podcasting. Además, este modelo ya está descontinuado.

JLab Talk Go

Y otro micrófono más lleno de buenas intenciones. El JLab Talk Go, así como el resto de sus variantes, asegura una calidad de grabación de 24 Bits, lo que no está nada mal, ero sigue siendo un micrófono poco recomendable para podcasting, puesto que no podremos situarlo a una altura adecuada. Tiene un sistema multi patrón, lo que nos asegura que podremos configurarlo según nuestras necesidades, pero de nuevo, con una cápsula de condensador, poco rechazo tendrá fuera del eje. Es mejor buscar otras alternativas.

Rode Smartlav+

Como ya hemos comentado, si hay una firma que ha apostado fuerte por el podcasting, esa es sin duda la marca Rode, pero no precisamente por este modelo. Se trata de un micrófono de solapa que no ofrece la mejor calidad de sonido. Es un micrófono interesante para otras aplicaciones, porque podemos conectarlo a cualquier dispositivo con entrada de auriculares. Esta característica lo que lo convierte en algo muy práctico si quieres grabar un vídeo en el que tu voz se oiga en primerísimo primer plano y no cueste mucho dinero.

Recordemos que para que un micrófono de solapa suene bien hay que invertir bastante dinero. Por ejemplo, este DPA 4080, con el equipo mínimo para ponerlo en marcha puede alcanzar los 1000 euros. Pero el Rode Smartlav+ no sobrepasa los 80 euros en el mercado.

Lo cierto es que puede resultar un micrófono práctico para hacer podcasting porque no tendremos nada delante de nosotros. De hecho, Rode propone una configuración específica con este micrófono para hacer un podcast de entrevistas. Consiste en dos unidades de este modelo unidas mediante un accesorio de su marca, de forma que se mezclarán las dos señales por igual. No es una mala idea y resultaría bastante práctico, si no fuera porque necesitaríamos de una habitación muy bien acondicionada para obtener una buena calidad de sonido sin reverberancias ni ruidos ajenos. Un micrófono de solapa es sin duda uno de los micrófonos no recomendables para podcasting.

Por otra parte, la experiencia me dice que un invitado con micrófono de solapa puede ser muy peligroso, porque al moverse puede generar ruidos no deseados, casi siempre roces con la ropa. Buena idea, pero necesitaremos una configuración más adecuada para nuestro podcast.

Hasta ahora hemos estado viendo micrófonos altamente recomendados, pero que en realidad son micrófonos no recomendables para podcasting. Todos esos modelos quedaban bastante lejos del estándar que buscábamos para nuestro podcast. Digamos que era evidente, bien por su diseño, o por sus características, no sirven para lo que buscamos. Los modelos que vamos a ver a partir de ahora son diferentes. A partir de aquí vamos a ver modelos recomendados en Internet que no están nada mal en realidad, pero que siguen sin ser adecuados para nosotros como podcasters.

MXL 990, un buen micrófono de estudio… para estudios profesionales

Continuando en el rango de los 80 euros podemos encontrarnos con el MXL 990, un micrófono que empieza a parecerse bastante al típico modelo de estudio. En realidad suena muy bien, pero se trata de un micrófono con una cápsula de condensador, con lo que para obtener un sonido seco y brillante necesitaremos un buen acondicionamiento acústico. Por tanto, al precio del micrófono tendremos que sumar lo que cueste acondicionar nuestra sala de podcasting. Es por eso que debemos buscar otras opciones y se queda dentro de la lista de micrófonos no recomendables para podcasting.

MXL V67G

Mismo precio, misma marca y características similares. Al igual que con el modelo anterior, necesitaremos de una buena acústica para poder producir un podcast en buenas condiciones.

Audio-Technica ATR 2020

Subimos el listón un poco más y rebasamos la barrera de los 100 euros. Recuerda que este era uno de los requisitos recomendables para obtener un micrófono adecuado para podcasting. Sin embargo, de nuevo nos encontramos con un micrófono de estudio, con tecnología de condensador, que necesita de una buena acústica para funcionar bien. Con estas características no nos queda más remedio que incluirlo dentro de la lista de micrófonos no recomendables para podcasting.

Shure MV5

Shure siempre ha estado a la vanguardia del sonido profesional, pero desde hace un tiempo ha querido asomarse al mercado doméstico con modelos tan originales como em MV5, un micrófono que nos recuerda al Blue Snowball, solo que a precios típicos de Shure, situándonos en los 120 euros.  Para facilitarnos las cosas también tiene salida de auriculares sin latencia.

Pero como pasaba con el Snowball, no podremos tener el micrófono a una altura adecuada, lo que hará que tengamos que locutar a cierta distancia y eso generará reverberaciones y sonidos no deseados en nuestro podcast.

NEAT King Bee

Pero si de diseño se trata, podemos acudir al Neat King Bee, un micrófono realmente llamativo. Lo curioso de los micrófonos de esta marca es que están construidos en plástico, con una estética muy pop, muy psicodélica. A pesar de usar un material tan barato, este micrófono no baja de los 140 euros. Es llamativo, sí, pero… es un micrófono de condensador, con lo que necesitará de una buena acústica. Por otra parte, no sé qué resonancia puede dar en una caja de plástico.

HyperX Quadcast

Uno de los micrófonos más frecuentes en las listas de recomendaciones es el HyperX Quadcast, un micrófono de condensador con controles de sensibilidad y toma de auriculares. Ya en el rango de los 150 euros nos encontramos con un micrófono que parece más pensado para gamers que para otro colectivo. No obstante, en su página web especifica claramente que también puede usarse para podcasting. El hecho de que tenga controles de todo tipo integrados en el micrófono me hace desconfiar, puesto que tiene que dedicar gran parte del espacio al hardware y no a la cápsula y el preamplificador, lo que realmente importa en un micrófono. De todos modos necesitaríamos un buen acondicionamiento acústico para obtener buenos resultados. No obstante, el HyperX Quadcast es un micrófono para lucir.

Quadcast S RGB

En el terreno de Quadcast, pero un escalón más arriba nos encontramos con el Quadcast S RGB… adiós a mi lámpara de lava. Este micrófono ofrece una completa personalización de luces y colores que hacen de su estética algo que no dejará indiferente a nadie. Orientado claramente a la comunidad gamer, todavía hay quien lo recomienda para su podcast. No lo voy a negar, hacer un vídeo con este micrófono debe ser muy interesante. Si tienes este micrófono en casa ya no necesitarás tu lámpara de lava. Es algo igual de hipnótico, pero además sirve para captar sonido. No está mal, pero no dará el resultado que buscamos en nuestro podcast.

Audio-Technica AT2035

Volviendo a la esencia de lo que es un micrófono semi-profesional, nos encontramos en el mismo rango de precio con el Audio-Technica AT2035, un micrófono que cumple lo que promete. Este es un modelo de micrófono con el que podemos obtener una muy buena calidad de sonido, pero de nuevo, al ser un micrófono de condensador, necesitaríamos de buenos absorbentes alrededor para evitar reverberaciones.

Blue Microphones Yeti USB

Bien, aquí hay que hacer un alto en el camino, porque estamos ante el micrófono más popular y más recomendado para podcasting de todos los tiempos. El Blue Yeti USB. Se ha convertido en todo un símbolo entre podcasters siendo, en realidad, el paradigma de los micrófonos NO recomendables para podcasting.

Puedo comprender perfectamente que su exclusivo diseño lo haya convertido en una verdadera pieza de coleccionista para muchos, en un micrófono deseable para todos. Pero la realidad es que este micrófono se aleja mucho de lo que necesita un podcaster.

Para empezar es un micrófono de condensador, lo que hace que sea muy sensible y capte gran parte de lo que hay en el ambiente. Aunque en sus especificaciones podemos ver que es cardioide, lo cierto es que en los vídeos y podcasts grabados con este micrófono se nota bastante la reverberancia de fondo.

Otro posible punto que debemos señalar es la idea de que se trata de un micrófono USB. Ya hemos hablado de otros micrófonos USB y lo veíamos incluso como algo positivo, porque nos parecía una heroicidad que en tan poco espacio o en un aparato de tan poco presupuesto pudiéramos encontrarnos con tantas posibilidades. Sin embargo, en un micrófono con un precio cercano a los doscientos euros esperamos algo más. Y lo cierto es que el previo y la interface incluidas en el Yeti no son de la mejor calidad que podríamos esperar. No tienen conexión XLR, con lo que aún después de la inversión que hacemos tampoco tendremos mucha oportunidad de mejorar la calidad de sonido que nos ofrece por defecto.

Seamos sinceros, estamos ante un micrófono con un diseño muy original. El plan de marketing que hay detrás de este micrófono ha funcionado a la perfección porque realmente se convierte en un objeto deseable y eso se traduce en las miles y miles de ventas que ha tenido en todo el mundo, aunque sea en detrimento de una buena calidad de sonido. El Blue Yeti es un vivo ejemplo de que el mercado no quiere lo mejor, sino aquello que es suficientemente bueno. O quizá algo que es bonito, aunque no sea lo mejor.

Blue Microphones Yeti USB Pro

El éxito del Blue Yeti llevó a la marca a crear otras variantes para poder llegar una cuota de mercado mayor. Siguiendo con el mismo diseño, crearon el Yeti USB Pro. Esta unidad tiene cosas muy interesantes. Para empezar no tiene una, sino tres cápsulas de condensador, lo que hace que puedas elegir entre distintos patrones. Además, tiene la interfaz USB, como su hermano menor. También dispone de una toma de auriculares sin latencia. Dispone de controles incorporados: Ganancia del micrófono, Muteo, Volumen del auricular y Selección del patrón. Como ves, muchas más prestaciones, pero no deja de ser un micrófono de condensador que necesita de un entorno acústico muy bien controlado para funcionar bien. Todas estas características aumentan el precio de forma considerable, lo que hace que siga estando en la lista de micrófonos no recomendables para podcasting.

Blue Microphones Yeti USB Nano

Con el paso del tiempo Blue ha seguido explotando la veta del modelo Yeti con otras versiones más. Por un lado, buscan llegar a todos los públicos y por otro, trtaban de modernizar el concepto de su modelo, pero sin deshacerse completamente del concepto de diseño. Del cruce de esos dos objetivos nace el Yeti USB Nano.

Un micrófono que reduce su precio sensiblemente respecto al Yeti original, así como su tamaño. Y además, un micrófono que ofrece un aspecto actualizado. Este micrófono ofrece las mismas características que su hermano mediano, pero en un tamaño más compacto y con otro estilo. No puedo negar que han conseguido un gran diseño. Sin embargo, para el caso que nos ocupa, sigue siendo un micrófono de condensador, un micrófono que invita a dejarlo en el soporte que trae incorporado, lo que no nos dejará con la libertad de maniobra suficiente como para que sea un buen micrófono para podcasting.

AKG Lyra

En el mismo rango de precios, por debajo de los 180 euros, nos encontramos con el equivalente del Blue Yeti, pero en AKG, la legendaria marca de auriculares. AKG ha visto el gran éxito de los micrófonos USB de alta gama y ha querido apostar por un modelo más sobrio que el Yeti, siendo fiel a la línea de diseño que AKG ha mantenido durante tantos años.

Al contrario de lo que podríamos pensar, el Lyra no tiene en su interior una única cápsula de gran tamaño, como ocurre con cualquier micrófono de estudio profesional, sino que tiene cuatro pequeñas cápsulas de condensador dispuestas en forma de X. ¿Para qué sirve esto? Pues bien, el fabricante promete una gran diversidad de patrones en este micrófono, de forma que podemos modificar de qué forma capta el sonido. Puede captar el sonido de forma frontal, frontal y posterior, estéreo ajustado y estéreo amplio.

No se puede cambiar el patrón de una cápsula microfónica, a menos que añadamos elementos físicos. Así que la única manera de modificar el patrón es poner varios micrófonos iguales y conectar unos u otros en función de lo que necesitemos. Por experiencia sé que una vez colocas el micrófono en tu estudio rara vez vas a cambiar la configuración, porque lo interesante de la producción sonora hablada es que tu voz siempre suene con la misma ecualización, mismo perfil y misma huella en general. Por tanto, esa posibilidad de cambiar patrones no resulta demasiado útil.

Podría ser interesante si usamos el micrófono en exteriores, donde en cada situación necesitaremos una configuración diferente. Por ejemplo, podríamos usar el micrófono para hablar entre dos personas, una a cada lado, en ese caso sí que debería cambiar el patrón. Pero si lo vamos a usar para podcasting, en el lugar donde grabamos habitualmente, es algo que no será de mucha utilidad.

Por otra parte, el hecho de disponer de esta versatilidad hace que tengamos que sacrificar mucho en cuanto a sonido se refiere. Para poder tener esta versatilidad necesitamos tener 4 cápsulas microfónicas, es decir, que el presupuesto de diseño que había para una cápsula se ha dividido entre cuatro, por lo que probablemente la calidad será menor de la que podríamos haber obtenido. Es decir, sacrificamos mucha calidad de sonido por una función que no vamos a usar en exceso.

Sin embargo, rompiendo una lanza en favor del Lyra, hemos de decir que AKG siempre ha sido excelente en sus productos, con lo que el previo y la interface integrados dentro de este modelo son algo mejores que los vistos hasta ahora. Eso hace que al menos nos aseguremos una relativa buena calidad de sonido, teniendo en cuenta que las cápsulas podrían ser mejores.

El caso es que para podcasting, una vez coloquemos el micrófono, no vamos a necesitar todas las características que nos ofrece el cambio de patrón a través de sus cuatro cápsulas. Y a cambio estamos renunciando a la posibilidad de un micrófono con una cápsula de mayor calidad.

En conclusión, un micrófono demasiado versátil para podcasting, lo que hace que la sumemos a la lista de micrófonos no recomendables para podcasting.

Rode NT1-A

El Rode NT1 es sin duda una apuesta seria que nos recuerda a los estudios profesionales de estudio. Tiene una cápsula de gran diafragma de una pulgada y tiene los contactos bañados en oro para conservar mejor la señal. De cualquier modo, los tres modelos siguen siendo modelos de condensador, de forma que necesitaremos de una buena acústica para obtener lo mejor de estos modelos. Por ello debemos incluirlos en la lista de micrófonos no recomendables para podcasting.

Rode NT-USB

Al igual que suedió con el caso de Blue Mics, Rode descubrió que el Rode NT1-A estaba siendo un éxito en ventas, especialmente para home estudios y aficionados a la producción de audio. Por ello quiso asegurarse una buena cuota de mercado creando versiones del Rode NT1-A para todos los bolsillos. De ahí nació el Rode NT-USB, el hermano mediano. Un micrófono que, a diferencia de su predecesor, no cuenta con conexión XLR, sino que es USB.

Hay que reconocer que está bien logrado, pero el hecho de ser un micrófono de condensador hace que sea uno de esos Sus modelos relacionados, el Rode NT USB y el NT USB Mini son modelos algo más distintos, pero que conservan la inspiración de su modelo inicial. De cualquier manera, es un modelo que conservan la inspiración de su modelo inicial y es sin duda un buen micrófono para aplicaciones de estudio con una buena acústica. Una buena idea, pero no para podcasting.

Rode NT-USB Mini

Con la idea de hacer más accesible la familia Rode NT, nació el Rode NT-Mini, siempre con características parecidas, pero con un menor tamaño y menos prestaciones. Este es el más pequeño de la gama, con un precio de entrada que no llega a los 100 euros.

Shure MV51

En lo más alto de nuestra lista nos encontramos con la apuesta de Shure por los micrófonos para creadores de contenidos.

Algo preocupante de estas recomendaciones en determinadas páginas web es que parecen basadas en una serie de características que creen que necesitan los creadores de contenidos o que de alguna manera intuyen que van a necesitar. El resultado de hacer caso a estas recomendaciones son vídeos con mala acústica, voces poco inteligibles y una calidad de sonido poco aceptable en general.

Pero a pesar de todo esto, es lo que la gente está demandando, así que la apuesta de Shure también va orientada en la misma dirección que hemos visto en otros ejemplos como el modelo equivalente de AKG.

Sin embargo este modelo de shure va un poco más allá, porque lleva incorporado un procesador digital de señal. Aquí ya no estamos hablando de un simple preamplificador, sino que el MV51 lleva en su interior un sistema digital que procesa la señal de audio antes de mandarla al conector USB. Y, ¿qué clases de procesos lleva a cabo este sistema? El procesador puede modificar el limitador, el compresor y el ecualizador de 5 bandas, lo que hace que el micrófono pueda controlar muchos más parámetros que en otros micrófonos.

Y realmente en la práctica se nota. Modificando el selector de 5 ajustes el micrófono se comportará de forma muy distinta ante la fuente de sonido, de modo que podemos optimizar el perfil para discurso, canto, plano, instrumento acústico e instrumento de alta intensidad. Es por eso que Shure anuncia su revelación como micrófono digital para creadores de contenidos.

Además, el micrófono tiene una construcción en metal y unas dimensiones reducidas… y por qué no decirlo, también un peso un tanto excesivo para su tamaño, de hecho sobrepasa el medio kilo de peso, lo que en relación a su tamaño hace que sea bastante denso. El diseño del Shure MV51 está inspirado en su ancestro, el Model 51 Sonodyne de 1947.

También se puede anclar a cualquier soporte de micrófono.

Es totalmente compatible con PC, Mac y con iOs, lo que nos puede dar la oportunidad de producir el podcast en nuestro propio iPad.

Como ves, tiene grandes bondades por un precio que no suele superar los 200 euros.

Parece una propuesta bastante atractiva, sin embargo sigue uno de los micrófonos no recomendables para podcasting por varias razones.

En primer lugar se trata de un micrófono de condensador de gran diafragma, lo que hace que necesite estar inmerso en una buena acústica para obtener resultados decentes. Tal vez estemos ante el mejor micrófono USB. Pero sigue sin ser interesante cuando tenemos que enfrentarnos a una acústica complicada, como un dormitorio o un despacho sin tratar o la cocina de nuestra casa.

A pesar de ser cardioide hemos visto tanto en las pruebas que hemos hecho como en algunas reviews, que el micrófono realmente sigue captando la acústica de la habitación, incluyendo reverberación y otros ruidos molestos para la locución.

Por otra parte es bastante ancho, lo que hace que sea un obstáculo para la vista, para ver a nuestro invitado o para leer guiones. Esa es la razón por la que durante los últimos cuarenta años los micrófonos se han construido con una forma alargada, porque al situarlos delante del rostro ocupan menos campo de visión.

En el futuro los micrófonos incluirán procesadores digitales mucho más potentes que serán capaces de discriminar el ruido de la voz. En ese momento podremos permitirnos alejarnos del micrófono y, por supuesto, los dispositivos podrán tener otras formas mucho más creativas e interesantes. Estoy seguro de que esto llegará pronto. De hecho el micrófono para videoconferencias Google Speaker Mic for Google Meet es una maravilla de la tecnología que ya es capaz de hacer cosas por el estilo. Desgraciadamente no está pensado para sonido de alta fidelidad y no es aplicable para podcasting. Como digo, esto es tan solo un adelanto de lo que está por venir. Mientras tanto, necesitaremos basarnos en otros criterios algo más conservadores a la hora de elegir la forma del micrófono.

Otra cosa que puede ser un inconveniente en este micrófono es la obsolescencia programada. Se trata de un micrófono que podemos controlar desde una App para iOs, cosa que puede resultar muy golosa. Pero lo cierto es que desde el punto de vista del podcasting no tiene mucha utilidad. Como siempre decimos, necesitamos micrófonos en los que poner una configuración determinada y poder mantener esa configuración a lo largo de los diferentes episodios. En nuestro caso, como podcasters, no vamos a toquetear la configuración tal vez durante la grabación durante meses o años.

Otro de los inconvenientes que tiene es que no dispone de sistema antipop ni antivientos. Si bien en otros micrófonos de esta lista hemos visto que tenían filtros integrados en la estructura del micrófono, el Shure MV51 no dispone de nada parecido y es precisamente el modelo que más lo necesita, por su membrana extra grande. Además, al tener una forma un poco extraña será más complicado encontrar un antiviento adecuado.

Como última apreciación, vemos que es compatible con una App para iOs y tiene una interfaz USB, lo que nos hace suponer que es un micrófono con una vida relativamente corta. Como siempre te digo, un micrófono puede durar toda la vida. Hay estudios que aún graban con micrófonos que tienen casi cien año de antigüedad. ¿Por qué? Porque buscan un sonido determinado que solo se consigue con esos micrófonos fabricados en el pasado, pero sobretodo porque los micrófonos siguen funcionando como el primer día. Acostumbrados a que un micrófono tradicional no tenga fecha de caducidad, pensar que este modelo pueda durarnos como máximo 10 o 15 años nos hace pensar que no podremos aprovechar nuestra inversión todo lo que queremos. Incluso si tuviera uno de sus ancestros, un Model 51 Sonodyne, aún seguiría funcionando perfectamente, más de setenta años después.

Todos estos pequeños inconvenientes desde el punto de vista del podcaster hacen que el Shure MV51 sea un gran micrófono, pero quizá para otras aplicaciones.

Tula Mic

La marca Tulamics nos ofrece un micrófono de condensador con dos cápsulas, una omnidireccional y otra cardioide. Lo interesante de este micrófono es que tiene grabadora incorporada. Parece muy tentador para podcasting, pero la realidad es que tiene el mismo problema de siempre, no tiene stand, no tiene salida XLR y no es dinámico, con lo que si no lo usamos en buenas condiciones acústicas difícilmente nos servirá. Además, su batería de litio lo hace altamente sensible a la obsolescencia programada. Gran diseño, grandes intenciones, pequeño tamaño, pero seguimos en el principal escollo de los micrófonos no recomendados para podcasting.

Mikme gold microphone. Calidad premium, calidad indiscutible, ideal para la industria del voice over

Este es un micrófono que me impresionó desde el primer momento. La idea de este modelo de Mikme es juntar una cápsula premium de gran tamaño con un transmisor de Bluetooth de alta fidelidad, de forma que podamos grabar en un dispositivo móvil igual que lo haríamos en una computadora. Realmente es una maravilla y de acuerdo con algunos Voice Over Talents, el resultado es muy bueno. Pero de nuevo nos encontramos con un micrófono de condensador que necesita de una muy buena acústica, como un estudio acondicionado.

Tal vez en una habitación de hotel con todo enmoquetado podría funcionar, pero sin duda necesita una sala con total ausencia de reverb para poder operar en óptimas condiciones. Además, la conectividad inalámbrica está pensada para secuencias de grabación más bien cortas. No hay nada tan fiable como el cable. Una conexión bluetooth podría jugarnos malas pasadas. Sin duda, no es uno de los micrófonos recomendables para podcasting.

Marantz Umpire

Tengo que reconocer que siempre he estado enamorado de esta marca. El primer producto de Marantz que tuve en mis manos fue la grabadora PMD-222, un magnetófono profesional con el que se podía de hacer de todo, siempre que fuera en un solo canal. Después tuve la Marantz PMD620 MKII, que también era una verdadera maravilla profesional.

Con el tiempo la marca ha ido virando, queriendo entrar en el mercado de los micrófonos USB de gama baja y ahí es donde llega el Marantz Turret. Un micrófono con el aspecto estético que hace honor a la marca, pero por un precio que no supera los 50 dólares. Aunque la marca siempre ha creado equipos ideales para radio y podcasting, en este caso, el Marantz Umpire no es recomendable para podcasting por varias razones.

En primer lugar es un micrófono de condensador y aunque en las especificaciones pone que es unidireccional, es un micrófono que recoge mucho ruido de ambiente. Por otra parte, su diseño rectangular hace que ocupe mucho espacio y dificulte la lectura del guión. En tercer lugar, la experiencia nos dice que un micrófono de menos de 100 euros difícilmente puede albergar en su interior un transductor que sea claro y transparente en todas las circunstancias.

Además, las especificaciones del micrófono también indican que está optimizado para el uso con Discord, Cortana, chat de voz y reconocimiento de voz, lo que nos puede dar una idea de que no será muy preciso en aplicaciones de voz profesionales. Por otra parte, siendo un micrófono de USB, su interfaz tiene una resolución de 16 bits, cuando la mayoría de micrófonos USB hoy en día ofrecen una resolución de 24. Sin duda, puede ser un micrófono muy bueno para determinadas aplicaciones, pero en podcasting tenemos otras opciones más interesantes.

Entonces qué micrófonos SÍ son recomendables

Como ves, estas recomendaciones que se hacen en Internet no están exentas de interés, pero desde luego se sitúan muy lejos de lo que necesitamos como podcasters. A la hora de elegir micrófono, en general, intenta que cumpla estas características:

• Dinámico: Ya hemos visto que es la tecnología que mejor funciona con acústicas complicadas o espacios sin acondicionar.
• Cardioide: Es de gran ayuda que el micrófono solo capter por la parte delantera y pueda rechazar el resto de sonidos.
• Membrana grande: Esto ayudará a que tu voz se capte con más nitidez.
• Precio superior a los 100 euros: Hemos visto que a partir de esta barrera de inversión la calidad mejora muchísimo. Invierte bien porque, si lo cuidas bien, un micrófono puede durarte toda la vida.

A ser posible, sin formas raras: Sé que la innovación es importante, que un micrófono con formas novedosas puede ser muy atractivo. Pero te puedo asegurar que si los micrófonos se hicieron de forma cilíndrica es porque tenían una razón de peso y es evitar ser un estorbo a la hora de producir nuestros contenidos.