4 técnicas de audio para no complicarte con tu podcast
¿Te ha pasado alguna vez? Que no te vuelva a suceder usa estas 4 técnicas de audio
Creo que son completamente necesarias estas 4 técnicas de audio que vamos a ver hoy. No sé si a vosotros os ha pasado, pero muchas veces, después de grabar un podcast he acabado así…
Esto sobre todo me pasó un día que tuve que hacer una entrevista a un político, primero falló el micrófono, después el editor de audio y perdí el archivo, después falló la cobertura de su teléfono móvil y al final me quedé sin entrevista casi me cuesta el puesto de trabajo.
Seguro que habéis tenido esa sensación alguna vez, porque la técnica juega malas pasadas y si no la entiendes muy bien, pues mucho más. Y eso hace que más de una vez haya acabado así.
Una pregunta: ¿Alguien de los que estamos aquí ha perdido alguna vez alguna grabación?
A mí cada poco tiempo me llegan noticias de alguien que ha perdido la grabación, o que no ha podido editar bien su podcast, o que el micrófono le ha jugado una mala pasada o que Skype se le ha ido muy durante la entrevista. De los errores se aprende y hoy quiero compartir con vosotros todo lo que he aprendido a lo largo de los años con experiencias como esta para que no os pase como a mí… o no os vuelva a pasar.
Quiero compartir con vosotros 4 técnicas de audio para no complicarte con tu podcast.
- Los tipos de micrófono que pueden ser mejor para nuestro podcast. Quizá incluso veamos algún tipo de micrófono que no conocíais.
- Vamos a descubrir cómo editar audio de manera profesional sin gastarnos mucho dinero con una plataforma fiable y potente.
- Veremos también una manera de comunicarnos con nuestros invitados sin complicaciones técnicas y sin fallos, claro está… y no es Skype.
- Y además vamos a ver una manera económica de hacer una copia de seguridad de nuestro podcast para no perder nunca más esos audios. Vamos a crear una caja negra, como la de los aviones, pero para nuestro podcast. Así, cuando falle el ordenador, cuando falle la emisión… siempre tendremos una copia de lo que hayamos grabado hasta ese momento.
Vamos a ver 4 técnicas de audio que nos ayudará a no caer en estos errores, pero sobre todo para llevar nuestro podcast al siguiente nivel.
Micrófonos, su elección es la primera de las 4 técnicas de audio
La primera de las 4 técnicas de audio es la correcta grabación de un podcast empieza por la elección del micrófono. Es el elemento más importante cuando se trata de generar contenido sonoro.
Los tipos de micrófono
- según su patrón, (es decir, cómo oyen),
- según su construcción cómo están hechos
- según el tipo de conexión que tienen.
Qué micrófono utilizar es uno de los eternos debates en el mundo del sonido y en el podcasting también
Para que todos tengamos una idea: En general un micrófono es algo que transforma la onda sonora en impulsos eléctricos. Hasta ahí bien, ¿no? Un micrófono es como un interruptor para la corriente eléctrica, como si fuera un pulsador. Y delante del pulsador hay una membrana sensible al sonido que acciona ese pulsador muchas veces por segundo. Esas variaciones en la corriente eléctrica las podemos interpretar como sonido. Eso es todo. Y a lo largo de la historia han inventado diversos métodos para que la membrana mueva ese pulsador.
Entre los muchos que hay hoy vamos a ver 4 tipos de micrófonos:
- micrófonos de carbón
- micrófonos de condensador
- micrófonos dinámicos
- micrófonos de cinta.
Micrófono de carbón
Es un tipo de micrófono que se creó en los años veinte del siglo pasado. Se oían muy mal. Vamos a escuchar primero una voz grabada con un micrófono de hoy en día y luego una voz grabada con un micrófono de carbón:
Hay una gran diferencia. No tienen punto de comparación.
Pero no os lo perdáis, sólo como curiosidad, actualmente estos micrófonos se están volviendo a fabricar y los están vendiendo a 400 euros. No es broma. Una de las empresas que se dedica a esto es Placid Audio. Parece que ese sonido retro gusta a algunos compositores.
Luego se fueron perfeccionando las técnicas de audio e inventaron el micrófono de condensador.
Micrófono de condensador
Es un tipo de micrófono con unas membranas pegadas a un acumulador de energía. Una de las membranas es móvil. Cuando nuestra voz golpea la membrana el condensador varía la cantidad de energía que puede almacenar y esas variaciones se transforman en impulsos eléctricos.
Son micrófonos generalmente con membranas grandes, muy sensibles, pero muy delicados. Se rompen muy fácilmente. No se pueden golpear, no se les puede gritar, no se les puede soplar, son caros de reparar…
Además, el sistema de condensador no es el mejor método para registrar sonido, pero lo han perfeccionado tanto a lo largo de los años que se ha convertido en un estándar en la industria del sonido. En la radio y en la televisión los descartaron porque eran poco prácticos.
Escuchemos una prueba:
¿Creéis que un micrófono tan delicado podría soportar esto?
No duraría nada. Por eso estos micrófonos se reservan para los estudios, donde están quietecitos y sin nadie que les moleste. Además tienen que estar en salas completamente insonorizadas porque son extremadamente sensibles, mucho más que el oído humano. En verano me dedico a cazar mosquitos con estos micrófonos. Puedo oír su zumbido perfectamente y saber dónde están.
Micrófono dinámico
Por dentro funcionan exactamente igual que un altavoz:
Una membrana sujeta a un electroimán. La membrana se mueve y el electroimán genera impulsos. Lo que tienen de especial es que si sujetas bien la bobina y el electroimán obtienes un micrófono muy resistente. Pueden ser muy duros. Cuando digo duros me refiero a esto.
Pues eso, muy muy duro.
Micrófono de cinta
Es el menos conocido de todos, vamos a ver un poco qué es esto de un micrófono de cinta.
El micrófono de cinta usa una tecnología muy antigua que data de los años 30. Tienen un mecanismo muy simple. Constan de dos imanes y una cinta de aluminio, nada más.
Y se caracteriza por varias cosas:
a) La primera es que tiene una excelente calidad de sonido. Tiene un sonido sedoso. Suelen ser muy cálidos, con un sonido muy peculiar. Suelen tener buenos armónicos. Estos micrófonos resultan idóneos para las personas que tienen una voz media o aguda o para mujeres. Incluso para instrumentos de viento metal. Hacen una muy buena combinación. Si tienes una voz muy grave es recomendable usar otro tipo de micrófonos.
Vamos a escuchar una prueba. es un minuto. No quiero que os fijéis en la canción, intentad prestar atención a los matices, a cómo la voz se desliza y Cómo las eses no suenan tan chirriantes. Es una sensación muy sutil.
b) Los micrófonos de cinta no destacan por su sensibilidad son bastante más sordos que los de condensador.
Son delicados. Es por eso que dejaron de usarse en las radios a partir de los años sesenta y los sustituyeron por micrófonos dinámicos, mucho más duros, como hemos visto.
c) No son muy caros, aunque, como siempre, esto depende del modelo. En Estados Unidos compré un par por 50 dólares cada uno, unos 40 euros en aquel momento. Sé que ahora han subido de precio porque se están poniendo de moda, pero aún así son asequibles. En España son un poco más caros de conseguir, pero el sonido merece la pena.
c) Son diseños bonitos y originales.
d) Lo mejor de todo: los micrófonos de cinta son eternos. Si se rompen, como son tan simples, resulta muy fácil repararlos. Tan fácil que voy a construir uno aquí mismo, ahora, delante de todos vosotros.
Lo que quiere el podcaster
Pues quiere:
- Que registre bien el sonido, que se nos oiga bien, a ser posible que mejore nuestra voz. No hay nadie a quien le guste su propia voz. Es un fenómeno que ocurre en nuestro cerebro. Yo siempre digo que aprender a hablar por el micrófono en parte es superar la fobia a escucharse a sí mismo. Un micrófono dinámico tiene que costar mucho dinero para que suene realmente bien, para que no modifique la voz. Por ejemplo, yo tengo aquí un micrófono Fonestar. Cuesta 10 euros, pero el sonido es penoso. Loa podcasters siempre buscamos algo mejor.
- Que no sea demasiado sensible. La mayoría de nosotros grabamos en casa, mientras nuestra familia sigue con su vida, por lo que necesitamos un micrófono que no sea muy sensible. Si usamos un micrófono de condensador es un problema, porque son extraordinariamente sensibles. Hay herramientas para hacerlos más sordos, pero no son del todo efectivas.
- Que sean económicos. Como todos los que empezamos con una afición, no siempre estamos dispuestos a gastarnos ochocientos euros en un micrófono. A veces ni cien. Reconozcamos que para que un micrófono suene medianamente bien tiene que estar por encima de los 100 euros.
- Que sean duraderos o que sean reparables. Estamos acostumbrados a que cuando un micrófono se rompe se tira y se compra otro, pero os sorprendería saber que la mayoría de averías de los micrófonos no cuestan más de veinte euros. Generalmente es un componente que puede costar cinco euros.
Si queréis un micrófono donde vuestra voz suene mejor, que no sea extremadamente sensible, que no sea muy caro y que os dure para siempre, el micrófono de cinta puede ser una buena opción.
Ahora ya tenemos el micrófono. Pero necesitamos editar lo que hemos grabado.
Editores de audio
Aquí viene otra de las 4 técnicas de audio. Cuando comenzamos con esto del sonido o con el podcasting en concreto, vemos necesario usar un editor de audio. Es raro que alguien grabe un podcast sin retocar alguna cosa después, o añadir algún efecto de sonido o sin introducir sintonías de entrada o de salida.
Lo interesante de un editor de audio es:
- que pueda ser multipista, es decir, que pueda grabar y reproducir en varias pistas a la vez. De esa manera podemos mezclar superponiendo unas a otras.
- que podemos aplicar efectos de otros fabricantes, como ecos, reverberancias etc.
- que podamos mover las pistas libremente, sin destruir el archivo original.
Vamos a ver algunos ejemplos:
Audacity
Cuando buscamos en Internet o preguntamos lo primero que nos dicen es que usemos Audacity. Y con razón. Es un software gratuito, multiplataforma y para lo que hacemos en podcasting es suficiente.
Sin embargo, la experiencia que tengo es la de que algunos podcasters, cuando llevan un tiempo comienzan a necesitar algo más. O bien porque Audacity se vuelve inestable con muchas pistas o bien porque quieren algo más potente para usar plugins y otras herramientas.
Audition
Durante años he visto a muchos usar Audition porque, seamos sinceros, era potente y fácilmente pirateable.
Yo empecé a usar Audition antes de que fuera Audition. Fue creado por la empresa Syntrillium y antes se llamaba Cool Edit 96. Luego llegó Adobe y lo compró, haciendo sólo unas pocas mejoras. Es realmente potente y es una solución completa, pero desde que han puesto la edición de pago recurrente ya no se piratea tanto, ni resulta tan fácil. Vale 20 euros al mes.
Garage Band
Si tenemos un Mac es fácil tener un multipista potente porque viene de serie con , un editor de audio más que suficiente para grabar un podcast, por complejo que sea. Yo estuve usándolo entre 2006 y 2009 y nunca tuve límites.
Proo Tools
Como editor de audio por excelencia está Pro Tools, que es el estándar profesional desde hace muchos años. La compra de una licencia son unos quinientos euros, aunque ahora también ofrecen la modalidad de suscripción por 23 euros al mes, lo que es una gran noticia para los profesionales del sonido, pero no para los podcasters adicionados.
Ardour
Pero existen alternativas que tienen lo mejor de ambos mundos: que sean gratis o casi gratis, como Audacity; y que sean casi tan potentes como Pro Tools. Estoy hablando de Ardour.
Aurdour es un editor multipista que se llega a comparar con Protools. De hecho es un DAW (digital Audio Workstation) completo, con todas las características necesarias para editar audio en cualquier sector audiovisual.
Es realmente potente. El podcast más complejo que he visto puede tener unas 80 pistas. Yo he llegado a reproducir 150 pistas en este editor sin problemas. La página de Protools dice que tiene 128 pistas. Hemos superado su límite con creces.
Sistemas de comunicación
Bien, ya tenemos un micrófono adecuado para grabar, tenemos un editor de audio que no nos ha costado casi nada… pero claro, ¿y si queremos contar con alguien en nuestro podcast? Esta es otra de las 4 técnicas de audio.
La necesidad de un comunicador
El siguiente problema que nos encontramos es cuando queremos entrevistar a alguien en la distancia, o cuando estamos haciendo un podcast con otra persona que está en otro lugar. ¿Cómo nos comunicarnos con calidad y fiabilidad?
El problema del ancho de banda
Hoy día ya no usamos el teléfono porque suena como a lata, lo que técnicamente se conoce como poco ancho de banda.
Dejadme que os explique un momento qué es esto del ancho de banda en el sonido.
Debéis pensar que el sonido viaja a través de una autopista con muchos carriles. En cada carril viaja una frecuencia determinada. En un lado los agudos, en otro los graves, los medios… Y así con todas las frecuencias audibles del ser humano desde 20 hz hasta 20 khz. Para que viajen todas las frecuencias necesitamos un ancho de banda (una carretera) muy grande y eso sólo se consigue con una buena conexión de Internet. Pero cuando no tenemos esa conexión, pues tenemos que reducir el ancho de banda. Así pues, si estrechamos esa carretera, lo que sucede es que el sonido se deteriora. O eso, o la carretera se corta. Por eso el teléfono, el radio despertador, la megafonía del tren, tienen un sonido muy característico, porque le cortan el ancho de banda para que sea más eficiente, más económico. Basta con que se entienda.
Skype… o reduce ancho de banda o se corta
Normalmente usamos Skype que tiene un ancho de banda más amplio que el teléfono, ¿verdad? No podemos negarlo. Skype es el estándar de comunicación a nivel mundial. Pero el hecho de que la mayoría lo use no significa que valga para todo. Skype es ideal para lo que es, para una comunicación en casa, para que la abuelita hable con el nieto. Pero las personas que tratan a diario con el sonido no les basta con Skype.
Lo que hace Skype es intentar conservar todo el ancho de banda posible, pero cuando no hay una buena conexión, pierde parte de ese ancho de banda o bien se cae, se entrecorta, lo que ocurre la mayoría de las veces.
Y nosotros como podcasters necesitamos algo que sea sencillo, que sea estable, con buena calidad. Así que necesitamos una herramienta diferente. Y esa herramienta existe.
¿Cómo lo hacían antes? La RDSI
Antiguamente se usaban unas conexiones telefónicas avanzadas que en España llamábamos RDSI, ISDN en el resto del mundo. Aún se siguen usando, de hecho. Eran carísimas. Yo he alquilado alguna y Telefónica me cobró en su momento 180 euros por la conexión más lo que costasen las llamadas. Todo para un evento de 3 días.
ipDTL, la ISDN digital de Internet
Sin embargo la tecnología también ha democratizado esto y ahora hay un servicio que es el estándar de los locutores profesionales en Estados Unidos y parte de Europa y se llama ipDTL. En Podcast Pro hemos hablado de esto.
La cuestión es que ipDTL cuesta 20 euros al mes. Para los que se dedican al sonido y se ganan la vida con esto, no es dinero, pero quizá para los podcasters que lo tienen como una afición puede resultar caro. Por eso hoy vamos a plantear otra opción gratuita que nos da el mismo servicio y que usan también los profesionales. Es un poco más feo, pero hace lo mismo: se llama Source Elements.
Source Elements
Source Elements hace lo mismo que una RDSI, establece una línea de audio estable, sin caídas y con una calidad de audio increíble. Además Source Elements es completamente gratuito.
Una de las 4 técnicas de audio más importantes: Caja Negra, no pierdas nunca más tus grabaciones
Si tuvieras que quedarte con una de las 4 técnicas de audio, quédate con esta.
Bien, pues ya sabemos qué micrófono escoger, tenemos un editor de audio potente y casi gratuito y además podemos conectar con cualquier invitado de manera gratuita y con gran calidad. Pero aún tenemos otro escollo.
He oído de muchos podcasters que suelen grabar su podcast y que por circunstancias la que sea, o por el PC, o porque cometieron un error… lo que sea, al terminar la grabación se dieron cuenta de que no habían grabado nada o lo habían perdido o el archivo estaba corrupto.
Venga, seamos sinceros, ¿a cuántos les ha pasado? Levantad la mano. A mí muchas veces, ya os lo he contado al inicio. A mí me pasó varias veces hasta que aprendí que una grabación nunca se debe grabar sólo sobre un soporte. Sé que me vais a llamar exagerado, “que tú es lo haces todo muy Pro”. Vale, llámame Pro y déjame grabar dos veces. Yo siempre grabo dos veces.
La necesidad de una grabadora
El problema es que para grabar dos veces al mismo tiempo hacen falta dos dispositivos y a veces sólo contamos con un ordenador y un micrófono. La solución más sana y la mejor de todas siempre es una grabadora.
Cuando me refiero a grabadora no me refiero a un dictáfono, sino a una grabadora de audio. Los dictáfonos tienen una entrada de micrófono, que no es lo mismo que una entrada de línea, es unas 20 veces más sensible. Si ponemos la señal de auriculares del ordenador en la entrada de micro de un dictáfono, sonaría más o menos así:
Por eso hace falta una grabadora. Pero las grabadoras son caras, valen más de 100 euros.
4.2. El minidisc como caja negra
Lo que yo os propongo es usar la vieja tecnología. Muchas veces pensamos que lo antiguo era analógico, pero la tecnología digital ya empezó a penetrar en el mercado en los años ochenta y noventa. En los años ochenta ya existía el CD. Y en el año 92 SONY hizo realidad el sueño de todo audiófilo y creó el Minidisc.
Mirad, este reproductor que tengo en la mano fue el primer Minidisc portátil y lo comercializó SONY en 1992. Costo el sueldo de un mes. Un amigo mío llamó a Sony para preguntarles qué coche regalaban con el Mini Disc, porque el precio… en fin.
Pero lo importante de todo esto es que ya en aquella época podríamos haber grabado nuestros podcasts con calidad digital, dicho sea de paso, con más calidad que el mp3. Lo interesante es que el Minidisc cayó en desuso y ahora ya nadie lo quiere. Y como nadie lo quiere, los grabadores de minidisc se venden a precios de risa.
Aquí tenéis uno que compré el otro día por 22 euros. Sigue siendo dinero, sí, pero podemos asegurarnos de que nunca más perderemos nuestros podcasts por el precio de una cena.
No exagero, ahí está la fecha. Esta es una captura de pantalla de la semana pasada.
Mirad, esta tarjeta es la que estamos usando en Jpod para hacer el Streaming. Lo interesante de esta tarjeta es que tiene una salida óptica y que cuesta 27 euros. Todos los modelos grabadores de minidisc desde del inicio tenían entrada y salida óptica. Eso significa que sonido puede grabarse de manera digital sin perder calidad de sonido. Pensad que cuando el sonido pasa por una mesa de mezclas el sonido pierde calidad, se deteriora, pero si lo pasáis por un minidisc nunca tendrá pérdidas. Podríamos pasar el contenido de uno sitio a otro varias veces y no lo notaríamos. Así que ya tenemos nuestra pequeña caja negra a un precio de risa.
Así que ya sabemos 4 técnicas de audio más
1. Un micrófono ideal para el podcast puede ser un micrófono de cinta, porque tiene todas las características que casi cualquier podcaster necesita.
2. Un buen editor de audio sin desembolsar una gran cantidad de dinero puede ser Ardour, que nos permitirá hacer de todo, sin límites
3. Para conectar con otras personas en la distancia podemos usar ipDTL y si no queremos gastar dinero, Source Elements.
4. Por último, para no perder nunca más las grabaciones de nuestro podcast usaremos como caja negra de seguridad un antiguo Minidisc.
Y todo esto para que la técnica no nos juegue de nuevo una mala pasada… o al menos intentarlo.
Con estas técnicas de audio tendréis menos complicaciones y más calidad.
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